SEGUNDA REUNIÓN
7 de mayo
7 de mayo
Ramiro
Gauna y Alicia Larramendy
Desde
su aparición la fotografía cuestionó e interpeló a las otras artes -y no sólo a
ellas- pues como dispositivo de visibilidad produjo un movimiento de
desterritorialización de los discursos, que generaban un cerco o blindaje de
seguridad, de las llamadas disciplinas artísticas o bellas artes.
La foto, al ofrecer una mirada
renovada sobre los objetos, sobre el registro y la reproductibilidad, interfiere
y disloca una discursividad y una visibilidad de carácter hegemónico, que
estampa sobre nuestros aparatos del ver, del decir y del sentir, objetos puros,
incuestionables, enteros y eternos.
¿Qué se esconde bajo esta
apariencia de pureza?: el síntoma, la fractura, la grieta que permiten
descubrir o generar condiciones de posibilidad para la emergencia de tiempos
heterogéneos en la imagen, que van a contrapelo del discurso lineal de la
Historia (con mayúsculas).
Tomar la Historia a contrapelo va
de la mano de una mutación, una posibilidad de bifurcar las coordenadas del
tiempo, con la irrupción a veces violenta, en ocasiones imperceptible, de una
singularidad. La modalidad de operación es el montaje. Operación que
interviene a través del desgarro, la
fractura que el montaje de la imagen permite, y a partir del cual, todo el
abanico del tiempo se abre ampliamente.
Didi-Huberman se pregunta ¿Qué relación
hay entre la historia y el tiempo que nos impone la imagen? A lo que responde
que la imagen adquiere prominencia por
sus movimientos de inagotables metamorfosis, por su aptitud dirigida a
proveerse de nuevas formas reacias a dejarse asimilar, además de “perturbar y
hacer recomenzar el pensamiento en todos los planos”. Esta forma de perturbación efectúa, en
palabras de Benjamin, un “dar vuelta la historia como a un guante”.
Siguiendo en ese campo de
cortes/montajes, imagen/representación, espacio/tiempo, se impone la pregunta
respecto de la posibilidad de reescribir o editar la historia (con minúsculas),
esa “otra historia” que subyace y sobrevive, como sobreviven e insisten en la
imagen los síntomas y las excepciones y que, sin embargo, demuestran su
fecundidad. Esta posibilidad de reescritura o edición propia de una historia
con minúsculas, desde una dimensión paralela o a contrapelo de la Historia con
mayúsculas, no será posible sin una lectura que desborde y permita desarreglar
el orden de los signos que circulan en determinado segmento de tiempo.
Frente
a ello resurge el collage con toda su fuerza
de corte, separación y distancia respecto al discurso ordenado de la
Historia. En palabras de Foucault “saber, no significa recobrar o recobrarnos.
La historia será efectiva en la medida que introduzca lo discontinuo en nuestro
propio ser. El saber no está hecho para comprender sino para cortar”.
Textos
Georges Didi-Huberman, “Ante el
tiempo, la historia del arte y el anacronismo de las imágenes”. Adriana Hidalgo
editora, 2008.-
"Cuando
las imágenes toman posición". Machado libros, 2008.-
Jean-Louis Déotte, “La época de
los aparatos”. Adriana Hidalgo editora,
2013.-
Walter Benjamin, “Estética de la
imagen”, La marca editora, 2015.-
Félix Guattari, “¿Qué es la
ecosofía?, Cactus, 2015.-
Roland Barthes, “La cámara
lúcida, notas sobre la fotografía”, Paidos Comunicación, 2011.-
Frédéric Rambeau: «La grieta de
la immanencia», divanes nómades 2, Una cultura del disenso, Córdoba, 2015.
Jacques Lacan, «RSI», sesión del
8 de marzo de 1975.
Horario: 9.00 a 13.00 hs.
Lugar: El Flotante, “Centro Cultural Siete
Corrientes”. Avda. Costanera y La Rioja (Muelle del puerto). Corrientes.
Inscripciones: $160; estudiantes
$110.-
Organizan: Multiplicidades.
Psicoanálisis en interfaz / école lacanienne de psychanalyse.
psicoanalisiseninterfaz@yahoo.com.ar
http://psicoanalisiseninterfaz.blogspot.com
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